Y comenzamos con una serie de películas de otro director muy conocido en la era del cine mudo, que no era estadounidense: F. W. Murnau. En las siguientes publicaciones, les estaré hablando de tres de sus mejores películas, al igual que un poco sobre su biografía y qué aportó Murnau, no solo en el cine mudo, sino para todas las eras del cine, incluyendo hoy día. La primera en la lista es "Fausto" (1926).
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"Faust" (1926) |
Al igual que nuestro querido amigo, Krauss, Murnau se dejó influenciar por el movimiento expresionista en Alemania en la década de los 20 para el estilo de sus películas. También se dice que antes de cumplir los 12 años, ya había leído obras de Shakespeare, Nietzshe, Schopenhauer e Ibsen, autores de los cuales obtuvo ideas para la creación de sus futuros filmes. Nacido en Alemania, el 28 de diciembre de 1889, Friederich Wilhelm Plumpe tenía un amor apasionado por la literatura, el teatro y el cine. Sin embargo, estudió primero filología en la Universidad de Berlín y luego, historia del arte y literatura en Heidelberg. Fue en esta última donde conoció al director, Max Reinhardt, quien lo invitó a pertenecer a un conjunto dentro del teatro que dirigía, llamado Deutsches Theater. Fue en este tiempo cuando adoptó el nombre de "Murnau" por la ciudad Murnau am Staffelsee, la "colonia de los mejores artistas bávaros", según esa época. Durante la Primera Guerra Mundial, Murnau se unió al ejército, convirtiéndose en comandante. En su internado en Suiza, Murnau escribió su primer guión cinematográfico (1918). Cuando regresa a Berlín en el 1919, decide trabajar como director y fundó su propio estudio de cine con el actor Conrad Veidt, quien había conocido en sus días dentro del teatro de Reinhardt. Su primera película fue "Der Knabe in Blau" (The Boy in Blue- 1919). Solo 3 de 7 películas de Murnau, desde 1919-1921 aún se conservan hoy día. Para solo mencionar algunas películas, se encuentran "Satanas" (1920), "Der Buclige und die Tanzerin" (The Hunchback and the Dancer- 1920), "Desire" (1921), "Nosferatu" (1922), "Phantom" (1922), "The Last Laugh" (1924) y "Faust" (1926). "Nosferatu" y "Faust" fueron dos de las primeras películas en que se compusieron "film scores" originales.
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F. W. Murnau (ambas fotos) |
En el mes de junio de 1926, Murnau firmó un contrato con el productor William Fox y se mudó a los EEUU, donde dirigió otras películas, como su gran éxito "Sunrise" (1927). Pero su experiencia en Hollywood se puede contar después, cuando les hable de esta película en otra entrada.
Por último, Murnau también trabajó con Robert Flaherty, un creador de documentales para filmar "Tabu" (1931). Ambos viajaron a Bora Bora para comenzar a filmar, pero luego de disputas, Flaherty perdió el interés en continuar con el proyecto, dejando a Murnau para que lo termine solo. Desafortunadamente, una semana antes de la premier de "Tabu", en Los Angeles, California, Murnau murió en un accidente de carro, el 11 de marzo de 1931.
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Arcángel (Werner Fuetterer) en "Faust" |
La película "Faust" está inspirada por el personaje ficticio de la novela de Johann Wolfgang von Goethe, con el mismo título. Fausto es un personaje muy conocido en leyendas alemanas. Las primeras historias publicadas llegan hasta el siglo XVI. Desde entonces, se han escrito novelas cuentos, canciones, musicales, obras, todas hablando de este hombre que vendió su alma al diablo por obtener mayor conocimiento, al igual que distintos poderes y placeres, por un término de años. En todas las historias, el diablo envía un representante, conocido como Mefistófeles, quien se convierte como el servidor de Fausto hasta que la cantidad de tiempo (usualmente 24 años) se cumpla.
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Gosta Ekman, como Fausto en "Faust" |
La versión de Goethe de la historia de Fausto es la más famosa y es de la cual Murnau se dejó llevar para la creación de su película. Todo comienza con una lucha entre el Cielo y el Infierno sobre el dominio de la Tierra. El diablo (Emil Jannings) y un arcángel (Werner Fuetterer) como representante de Dios discutían el asunto, cuando el diablo se le ocurre hacer una apuesta. Si él lograba corromper el alma de un pobre hombre, obtendrá los derechos de poder sobre la Tierra. Para comenzar, el diablo desata una epidemia mortal al país de Alemania. Fausto (Gosta Ekman) es un viejo médico que se siente desalentado porque no puede encontrar una cura para la epidemia. En un momento de crisis, Fausto pierde todas las esperanzas en el mundo y en Dios y decide quemar todos sus libros de estudio y de medicina, junto con la Biblia. Uno de los libros entre las llamas se abre y le muestra a Fausto una página donde dice cómo invocar al diablo. Fausto sigue las instrucciones del libro e invoca a Mefisto (en vez de Mefistófeles), quien le ofrece ser su sirviente por las próximas 24 horas. Solo tiene que llenar un contrato indicando que si Fausto decide extender los servicios de Mefisto por más tiempo, su alma le pertenecerá al diablo. Fausto acepta y le pide a Mefisto el poder de curar a los enfermos. Mefisto se lo concede, pero mientras Fausto curaba uno de los enfermos, no lo podía tocar porque llevaba puesto un crucifijo. El pueblo tomó esto como una señal de que Fausto había abandonado a Dios y aliado con el diablo y comenzaron a apedrearlo. Indignado, Fausto regresa a su hogar, donde Mefisto logra distraerlo, mostrándole la imagen de una hermosa mujer, la duquesa de Parma (Hanna Ralph). Fausto queda encantado por su belleza y le pide a Mefisto que lo haga más joven, lo cual Mefisto también se lo concede. Mientras el joven Fausto se besaba con la duquesa, Mefisto le indica que ya habían pasado las 24 horas, lo cual significaba que Fausto volvería a la normalidad. Pero el joven le ruega que extienda el tiempo y decide vender su alma para mantener su juventud. Pasa un período de tiempo, cuando Fausto comienza extrañar el pueblo donde se había críado y decide regresar. Aquí conoce y se enamora de una mujer, llamada Gretchen (Camilla Horn) y le pide a Mefisto que lo ayude a conquistarla. Luego de muchos intentos (al parecer, Gretchen le tenía miedo a Fausto), Mefisto le entrega a Gretchen un collar de oro. Al ponérselo, ella queda enamorada de Fausto. Ambos terminan juntos después de esto. Una noche, Fausto visita el cuarto de Gretchen y comienzan a besarse (entre otras cosa...). Aquí es donde se comprueba la verdadera naturaleza de Mefisto, cuando decide buscar al hermano de Gretchen, Valentin (William Dieterle) y avisarle de lo que está haciendo su hermana con Fausto. Enfurecido, Valentin corre hacia la casa. También, Mefisto crea conmoción en la casa de Gretchen, para que su madre (Frida Richard) también se entere de lo que sucede en el cuarto de Gretchen. Al ver su hija en brazos de Fausto, la madre se sorprende tanto que le da un ataque al corazón, muriendo al instante. En ese momento, llega Valentin a matar a Fausto. Ambos comienzan a pelear con espadas, pero sin que ninguno se diera cuenta, Mefisto mata a Valentin, haciendo ver como si fue Fausto el culpable de su muerte. Mefisto le advierte a Fausto que debe huir, pero antes de eso, corre por toda la ciudad, gritando "Asesino", para que todo el pueblo se entere de los acontecimientos. Fausto logra escapar con Mefisto, dejando a la pobre Gretchen sobrevivir las condenas que le hace la gente. Todos la acusan por ser una ramera y permitir la muerte de su familia por culpa de sus pecados. En los próximos años, Gretchen fue excluida de la sociedad, obligándola a vivir como una deambulante, con un bebé en sus manos, el bebé que Fausto le dejó. Una noche fría, en medio de una tormenta de nieve, Gretchen va de casa en casa buscando refugio, pero nadie la quiere dejar entrar. Dándose por vencida, se sienta en el suelo, con bebé en manos y comienza a delirar. Imagina que hay una cuna frente a ella, donde pone su bebé y se queda dormida. Cuando despierta, unos policías la encuentran y descubren a su bebé muerto, enterrado en la nieve. Al ver esto, la acusan a Gretchen de haber matado a su hijo y la condenan a muerte en la hoguera. Antes de quemarla, ella le grita a Fausto, pidiéndole que la salvara. Desde lejos, desde el infierno, quizás, Fausto escucha sus llamados y le pide a Mefisto que lo lleve hasta Gretchen. Ya a Gretchen la quemaban cuando Fausto llega y entra en la hoguera para quemarse junto a ella. Al ver esto, el arcángel perdona a Fausto y le permite entrar al cielo junto a Gretchen. Le dice entoncés al diablo que ha perdido la apuesta, porque al final, el amor fue más poderoso que la avaricia y el poder. El amor triunfó nuevamente...
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Escena en "Faust" |
La película presentó muchos adelantos para la época en que se hizo, entre ellos los efectos de luz y sombra para cambiar el tono de una escena y los efectos especiales usando dos cámaras filmando diferentes tomas. Se pueden ver varias técnicas de cámara, como el efecto de proyectar una persona o imagen de una escena en otra escena, como si fuese un fantasma o un sueño visualizado por uno de los personajes. También, Murnau usó lo que hoy día se conoce como "técnica de cámara desencadenada" o
unchained camera tecnique, una técnica innovadora para los futuros cineastas, donde les permiten hacer tomas de cámaras en movimiento. De ahí vienen los "pan shots", los "tracking shots", etc. Se necesitaría de un blog exclusivamente para explicar todas las tomas te cámara, al igual que las distintas técnicas de cámara que existen para filmar una película. Quizás en un futuro...
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Escena de "Faust" |
Como decía, "Faust" mostró el potencial de este gran director. Costó una gran cantidad de tiempo y dinero para hacerse. Y al parecer, Murnau era muy perfeccionista, creando varias versiones de la misma película. Hoy día solo existen 5 versiones, todas con escenas propias que no aparecen en las otras versiones. En un futuro, quizás veré otras versiones, pero por lo que vi, la película no me decepcionó en lo absoluto. Véanla, sean admiradores de películas mudas o no. No se van a arrepentir.
Quizás es por la influencia del expresionismo alemán o las ideas de sus autores preferidos lo que hace que esta película parezca una obra de arte y que esté bien adelantada para su época. En una página de web de su biografía, se dice que "mientras D. W. Griffith escribía las reglas de hacer películas, Murnau ya nos estaba enseñando cómo romperlas". En "Birth of a Nation" había mucho diálogo, mucha explicación, como si el director narrara la historia, detalle por detalle, para dejarle bien claro al público lo que quería presentar en su película. En vez de dictarla, Murnau deja que la historia tome su propio rumbo. Utiliza más la acción que el diálogo para que nosotros mismos, el público, descubramos lo que nos quiere decir la historia.
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Gretchen (Camilla Horn) en "Faust" |
Los personajes son muy humanos, actúan de la manera en que una persona como tú o yo lo haría. Dejan de aislarse de nosotros, dejan de ser actores para convertirse en seres que existen a nuestros alrededores. Hay muchos "faustos", "gretchens", incluso "mefistos" en nuestra sociedad.
Es también una película que presenta un tema más oscuro: la avaricia del ser humano. Siempre deseamos tener más, poseer más, nunca estamos satisfechos. ¿A qué medidas llega nuestra ambición? ¿Lo entregaríamos todo, hasta nuestra propia alma, para solo tener poder por unos minutos? ¿Dejaríamos todo para ser ricos por un solo día? Existen momentos cruciales en la vida donde se descubre la verdadera naturaleza de las personas, si son buenas "de corazón" o engañan con una cara linda; si tienen sus ideales bien firmes o solo aparentan ser los más fuertes y son los primeros que caen en el abismo. Si el diablo se presenta en tu casa y te ofrecería lo que más deseas en este mundo si le vendes tu alma, ¿aceptarías la oferta?
La película nos deja con un final esperanzador. Murnau se dejó llevar por el final de la novela de Goethe, donde se muestra que a través del verdadero amor, la gente se arrepiente y se hace buena, vencen todo mal. Pero, ¿ese es el verdadero final? En otras leyendas, Fausto terminó condenado para siempre, en el infierno. Y ahora les pregunto, en el mundo en que vivimos, ¿hay mucha gente que de verdad se arrepiente de sus malos actos y deciden cambiar? ¿Y qué es un acto bueno o malo, bajo los estándares? ¿Qué hace falta para que una persona se considere "buena" o "mala"?
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Escena en "Faust". Significa "amor" en alemán. |
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